Los individuos tenían bajo su control la cancha del residencial que colinda con una escuela elemental.
El Negociado de la Policía desarticuló en la madrugada de hoy martes, 22 de maro de 2022, una banda criminal que tenía un almacén de armas ilegales en el residencial Enrique Zorrilla, en Manatí, y mantenía bajo su control la cancha comunal, la cual colinda con una escuela elemental.
Durante la intervención, resultado de una investigación por la División de inteligencia de FURA, los agentes arrestaron a tres adultos y aprendieron a un menor de edad, a los que se les imputa la operación de varios puntos de venta de drogas en la zona y la comisión de delitos violentos.
Los detenidos pertenecen a un grupo delictivo que, hasta el día de hoy, tenía bajo su dominio el área de la cancha de juego contigua a un plantel escolar de nivel elemental. Para así, bloquear el acceso al lugar y evitar que los vecinos la utilizaran para hacer deportes. La organización utilizaba planchas de metal, o tolas para controlar la entrada.
«Con este operativo impactamos a un grupo altamente violento que utilizaba el residencial público cercano a una escuela elemental como base de operaciones para las actividades ilegales en la zona de Manatí. Las armas de fuego cumplen un papel fundamental en el crimen organizado y, por su potencia y alcance, constituyen el instrumento preferido de las personas que infringen la ley. Es por ello que se encuentran en el centro de nuestros esfuerzos por mantener el orden y dar seguridad a las comunidades», declaró el comisionado de la Policía, Antonio López Figueroa.
Entre las armas ocupadas por los efectivos policíacos figuran rifles de asalto, pistolas y cargadores para las armas, las cuales eran almacenadas en tres unidades de vivienda contiguas a la cancha de baloncesto del complejo residencial.
Los agentes ocuparon tres vehículos de motor que fueron señalados por los canes de la unidad K-9, como posibles contenedores de materiales ilegales. La Policía investiga si estos fueron utilizados en la comisión de un asesinato reciente en la zona de Manatí. Igualmente ocuparon dos kilos de cocaína y otros tipos de narcóticos procesados y empacados para la venta.
«El fácil acceso a las armas de fuego ilegales facilita la violencia que afecta a los individuos, familias y comunidades completas. En este caso, las operaciones de la organización se llevaban a cabo cerca de un centro educativo y de una comunidad escolar que merece seguridad y protección. La incautación de las armas y de los que las utilizaban es un medio para reducir la violencia y darles paz a los ciudadanos», declaró el director de FURA, coronel José Rodríguez.
Las detenciones y la ocupación del arsenal son producto del diligenciamiento de tres órdenes de allanamiento en igual cantidad apartamentos en el complejo de vivienda. En el operativo participaron la división de Inteligencia de las Fuerzas Unidas de Rápida Acción (FURA) y otras unidades de la Policía, tales como la Aérea, de Rescate de SWAT, Arrestos Especiales y Vehículos Hurtados, el Cuerpo de Investigaciones Criminales y otras divisiones del área policíaca de Arecibo. La acción policíaca contó con el apoyo del Departamento de la Vivienda y Homeland Security.
Los casos serán consultados con la fiscalía de Arecibo como parte del proceso.